Las caídas, esos odiosos accidentes que pueden hacer que tu iPhone termine ahogado en el inodoro o hecho pedazos en el suelo. Normalmente todo ocurre en menos de dos segundos, aunque cuando ocurre suele dar la impresión de que el tiempo se detiene, y el vacío que se siente en el estomago es casi inevitable.
Sin embargo, muchas veces un buen forro puede ser la diferencia entre un susto y un dolor de cabeza, y G-Form, una empresa bien conocida por ofrecer los forros más extremos para teléfonos y tabletas, decidió probar la calidad de su producto llevando un iPhone 5 a la estratosfera y luego dejándolo en caída libre hacia la Tierra.
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